MURO DE RODA.

En la comarca oscense del Sobrarbe, sobre la cima del Tozal de Muro que divide los valles del Cinca y de La Fueva, a más de mil metros de altitud se yergue altivo el conjunto religioso-militar fortificado de Muro de Roda.

Se accede a él a través de una pista de tierra que parte de Tierrantona, capital del valle de Fueva. La pista es principalmente aconsejable recorrerla con vehículos todo terreno, aunque en los meses de verano es posible llegar a ella en turismo si el conductor tiene paciencia y pericia.

Se comenzó a fortificar en el año 1017 bajo el reinado del rey navarro Sancho III, "el mayor". Tras su campañas para recuperar las tierras del Sobrarbe y la Ribagorza, que habían caído en poder musulmán tras las incursiones de Abd al-Malik (1006), Sancho III creó una autentica línea de fortalezas defensivas que permitiesen mantener el control de los territorios reconquistados.

 

Frente a cada fortaleza musulmana (Ejea, Ayerbe, Alquézar, Barbastro, Graus, El Grado, etc.), Sancho III opondrá, de Oeste a Este, una o dos cristianas, como las de Peña, Sos, Luesia, Biel, Agüero, Murillo, Loarre, Nocito Secorún, Buil, Samitier, Monclús o Perarrúa, entre otras. Esta línea defensiva permitió asegurar el control de los condados de Aragón, Sobrarbe y la Ribagorza.

Originalmente tenía la denominación de Muro Mayor, pero tras su cesión por Ramiro II a la comunidad religiosa de Roda de Isabena cambió su nombre a Muro de Roda. El primer edificio que se construyo fue la ermita de San Bartolomé, probablemente en el año 1040 y posteriormente en el siglo XII se edificó la iglesia de Santa María de la Asunción.

 

El recinto amurallado se encentra en la parte más alta y tiene una longitud perimetral de más de 150 metros de perímetro y 50 metros de ancho. Dentro del recinto amurallado se encontraban además de la iglesia,  la ermita de Santa Bárbara, que servían de cierre de la muralla en la parte norte y sur, la casa del concejo, la casa del maestro y una herrería.

 

 

 



La iglesia de Santa María data del siglo XII y es de estilo románico, originariamente tenía tres naves, aunque posteriormente se reformó dejando una única nave, acabada en tres ábsides que se encuentran incrustados en la muralla forman parte del sistema defensivo. La torre es de planta rectangular siguiendo el estilo de otras existentes en él y fue reformada en el siglo  XVIII. Está edificada sobre el ábside sur y parte del central.

Tanto la iglesia como todo el conjunto amurallado fue declarado bien de interés cultural por el gobierno de Aragón. 

 

 

Fuera del recinto amurallado y a unos 400 metros del mismo, se encuentra la ermita de San Bartolomé, el edifico más antiguo del recinto. Probablemente se comenzó a construir en el año 1940 como un  sencillo templo de nave rectangular y cabecera plana al uso de la tradición hispano-visigoda.

A finales del XI fue reformado, elevando bóvedas de medio cañón que precisaron reforzar el muro por medio de arcos ciegos al interior. Entonces se cegaron las puertas primitivas y también se añadieron sendas capillas laterales proporcionándole planta de cruz latina. En  el siglo XVI se le añadió un pequeño claustro cuadrangular.

 

 

No sólo destaca Muro de Roda por su valor histórico, su valor paisajístico es igualmente importante. Las vistas del embalse de Mediano y del valle de la Fueva son realmente impresionantes.